El pueblo amigable y tranquilo, Tupiza, en plena gloria desvanecida. Por un lado tiene rasgos recios, pero por otro está puesto en un escenario bien impresionante. Así lo encontramos.
Pero una tragedia nos esperaba… No había café en Tupiza. Bueno, no de la clase que deseábamos tomar. ¿Puede creerlo? Los que nos conocen se darán cuenta de que era la tragedia definitiva.
Para compensar eso, y tratar con la falta de cafeína y el
Este blog gira en torno de mis experiencias y vida en Bolivia, un lugar maravilloso y fascinante donde vivir.
Parecía y sonaba como una zona de guerra
Había fuertes explosiones, estallidos de luz, y el olor acre de humo. Parecía y sonaba como una zona de guerra.
Al dar las doce de medianoche se alborotaron los cielos sobre Tarija. Las nubes se volvieron de ser malhumoradas y rebosantes de lluvia a ser multicolores formas radiantemente iluminadas con la negrura de la oscuridad como telón de fondo. Era ensordecedor el ruido y majestuosamente bella la vista. El estruendo de cohetes que explotaban en el aire retumbaba bien entrada en la noche.
A los bolivianos les encantan los cohetes en el mejore de los tiempos, y la exhibición de fuegos artificiales este Nochevieja fue lo mas impresionante que habíamos visto. Abarcaba toda la ciudad. ¡Fue muy
Al dar las doce de medianoche se alborotaron los cielos sobre Tarija. Las nubes se volvieron de ser malhumoradas y rebosantes de lluvia a ser multicolores formas radiantemente iluminadas con la negrura de la oscuridad como telón de fondo. Era ensordecedor el ruido y majestuosamente bella la vista. El estruendo de cohetes que explotaban en el aire retumbaba bien entrada en la noche.
A los bolivianos les encantan los cohetes en el mejore de los tiempos, y la exhibición de fuegos artificiales este Nochevieja fue lo mas impresionante que habíamos visto. Abarcaba toda la ciudad. ¡Fue muy
Suscribirse a:
Entradas (Atom)